Cuando una persona se enamora es imposible imaginar todo lo que se puede desencadenar, un buen día la prueba de embarazo da positivo y tampoco imaginas que serás presa de insultos y de presiones pero mucho menos puedes imaginar que años después estarás demandada por la paternidad de tu hijo.

Así es como me encuentro ahora, demandada… que sentimientos desencadena todo esto? Mucha pero mucha impotencia, a veces no logras entender el para qué de todo esto. Porque yo si fui capaz de respetar las decisiones de este sr.  y rehacer mi vida dándole lo mejor a mi hijo, porque esa soberbia de solo demostrar no sé qué, sin antes detenerse a pensar en el daño… este proceso es desgastante para todos, yo a estas alturas no sé cómo va a parar todo esto y si de verdad será benéfico para mi niño, sobre todo emocionalmente al relacionarse con una persona inestable como él.

Alguna vez este sr. me dijo que esto solo me causaría incomodidad a mí, que al niño no, vaya inexperiencia como padre!, él no sabe que el niño tiene una identidad formada que reconoce sus nombres y apellidos a la perfección y ahora de golpe, será cambiarle todo porque el en su momento no quiso responder, así  las cosas, el siempre ve por el mismo. Él tampoco sabe que desde el embarazo todo daño e insulto hacia mí, es percibido por el niño y hay estudios que demuestran esa conexión madre e hijos aunque él no quiera verlo ni aceptarlo.

En medio de toda la incertidumbre que genera el que pasará de aquí en adelante con el ser más importante de mi vida, solo queda pensar positivo y decir “ojala que todo esto sea promovido por un buen sentimiento para mi hijo” y todo se vuelve a derrumbar cuando la contra parte al solicitarle una propuesta económica responde: “Donde pico piedra para sacar oro”. No se trata de picar piedra se trata de esforzarse pero ni siquiera se ve la intención, tal pareciera que quiere ser llamado padre con el mínimo esfuerzo, pero bueno ese asunto ya no me concierne a mí, será Dios y mi hijo quien lo juzguen.

Y ante todo esto ¿Cómo sobrevive una madre soltera?

Algunas mamitas deciden pelear por lo alimentos, otras como en mi caso no piden nada pensando en vivir tranquilas, al final si ya se ha llegado ante el juzgado, creo que hay cosas importantes a tomar en cuenta:

• Nunca pero nunca hables mal de la ex pareja con tu hijo, (aunque quieras desahogarte y gritar que es el peor de los hombres). Sé que es difícil pero para eso hay amigos y familia, no ensuciemos una cabecita limpia con rencores que nos pertenecen a los adultos. En mi caso han llegado a insinuar que he hablado mal del el con el niño, pero no me conocen, mi odio por este tipo puede ser enorme, pero el amor a mi hijo es un millón de veces mayor. Piensa también que las futuras relaciones de tu hijo estarán basadas en como sea el trato entre sus padres.
• Trata de que el proceso sea invisible para tu hijo,  él no tendrá  por qué pasar por el estrés, en este caso lo citaron y yo no le comente nada hasta el mismo día en el que le dije que iríamos a una oficina en el que unas personas platicarían con él.
• Fortalécete: Es una situación difícil y larga, en los que hay días que quisieras quedarte en tu cama a llorar todo el día, pero no caigas, arréglate bonita, sal con tu hijo, tómense de la mano, hagan actividades que les hagan sonreír.
• Esfuérzate: Nunca pierdas de vista que el pilar más importante en la vida de todo niño es su madre, que mejor ejemplo que el del trabajo para sacarlo adelante.
• Para un juicio se necesita mucha fuerza, se dirán cosas hirientes, a veces es necesario expresar cosas que quisieras borrar de tu vida, pero es inevitable.
• Cuida tu autoestima: Podrán decir misa, pero tú debes tener bien claro quién eres y todo lo que has hecho. Cada decisión que es tomada con amor hace avanzar no lo olvides.
• Busca ayuda: Existen grupos de mujeres que pasan por situaciones similares y puedes retroalimentarte de ello, saber que no estás sola en el proceso, incluso ayuda psicológica que te de la fortaleza necesaria para cuidarte a ti misma y a tu(s) hijos.
• Confía en Dios (o en la fuerza en la que creas) siempre hay una esperanza y detrás de toda tormenta llegará la calma.

Este caso aún no termina, pero continuaremos con la cabeza en alto haciendo solo lo mejor para el bienestar y la salud emocional de mi niño. Si estas en una situación como esta, ánimo… al final la vida acomodará las piezas.