Te pasaste todo el día en tu trabajo o atendiendo al bebé en tu casa. Pero ya (¡por fin) está bañado, alimentado y dormido. Para cuando por fin te dejas caer en una silla o en un sillón a descansar, ves un papel tirado bajo la mesa. Y polvo acumulado junto a un mueble. Y cuando quieres hacer cuentas, recuerdas que tu casa lleva sin limpiar más de 20 días. Y la desesperación o la culpa (¡o ambas!) se apoderan de ti.

Cuando una está exhausta la mayor parte del día, la limpieza de la casa para a un último plano. Y no está mal, pero siempre será un pendiente que te estará molestando en tu mente. Entonces, mejor armarte de un plan para tener la casa limpia de acuerdo a tus posibilidades.

¿Cómo mantener la casa limpia?

Es suciedad o desorden?

Es muy diferente una casa sucia de una desordenada.

Una casa puede estar muy limpia, pero si está desordenada (ropa en los sillones, libros sobre una mesa, platos sucios en el fregadero) la casa nunca se verá limpia.

Una casa sucia, con pisos sucios y tierra en los muebles, tampoco es la mejor opción para vivir.

La solución no es sólo limpiar, trapear, pasar un trapo a los muebles: lo que se quita de un lugar para su uso inmediato, debe volver a su lugar original: Si del antebaño tomas la secadora de cabello y te secas el cabello en la sala mientras miras la TV, debe regresar al antebaño apenas hayas terminado de usarla.

Si estás acumulando ropa, libros, libretas, apuntes universitarios o cajas de cartón, toca hacer de tripas corazón y empezar a tirar todo lo que no uses o lo que no sirva. Cuesta al principio pero ver espacios amplios y limpios, lo valen.

Sala y baño limpios

Son los dos únicos lugares que deben ser limpiados y mantenidos casi obligatoriamente. Son los lugares en donde llegarán esas visitas que no puedes evitar. Si cada día se le dan un repaso a los muebles para que no acumulen tierra y el baño limpio y seco, no deberías demorar más de 40 minutos en cada lugar.

Resto de la casa

Para tener una casa limpia, puedes dedicarle 20 minutos a cada habitación y luego descansar antes de dedicarte a otra habitación -o bien- seguir al día siguiente. Cualquier horario es válido si no molestas al resto de la familia o a los vecinos. No, no es raro limpiar los estantes de la cocina a las 4 de la mañana, si lo que tienes es insomnio y sólo das vueltas en la cama.

No te fíes del fin de semana

No dejes todo para el sábado y domingo. El fin de semana se va en un suspiro y tu sigues sin tu casa limpia. Durante la semana, día por medio, lava una carga de ropa, sécala, dóblala y guárdala: Sólo así podrás mantener un orden con la ropa de diario.

Constancia y ganas son las únicas cosas que necesitas para mantener tu casa en orden.

Imagen | Young mother with a baby boy doing housework stock photo