Cuando los bebés comienzan a llegar a la casa, una descubre que no siempre ha tenido el botiquín más adecuado. Por necesidad o por recomendación de tu pediatra, puedes comenzar a completarlo con la ayuda del siguiente listado:

Analgésico: Tempra o similar, es el primer elemento que debe estar a tu alcance en el botiquín infantil. Por supuesto, tu pediatra debe indicarte la dosis adecuada para tu bebé y las ocasiones en que puedas dárselo a tomar. Fiebre, irritación, dolor de oídos o para aliviar las molestas vacunas, un analgésico siempre es necesario.

Termómetro digital: La mejor inversión que hice en éste campo fue un termómetro digital, apenas se apoyaba en su orejita, arrojaba la temperatura que tenía mi bebé. Rápido para ambas partes, sin molestias porque suficiente tiene el bebé con sentirse afiebrado para todavía tener que hacer malabares para colocar y mantener un termómetro debajo de la pequeña axila.

Vicks Baby Rub: No soy fan de aplicar este remedio a menores de 2 años, pero a partir de esa edad, puede ayudar mucho si se coloca en la espalda o para cuando empiezan los dolores de crecimiento. Hay opiniones encontradas, grandes defensores y grandes detractores. Pero cada familia sabe qué es lo que les funciona mejor.

Sterimar: En su versión bebé, para destapar sus fosas nasales y ayudarle a respirar.

Aspirador nasal: La famosa «perita» o «gotita» o jeringa de goma, te ayudará a destapar delicadamente la nariz de tu bebé cuando la gripa o congestión le moleste.

Crema para las rozaduras: En algún momento tu bebé puede rozarse poco o mucho y una crema adecuada hará un mundo de diferencia. Evita pasar toallas húmedas en la zona irritada, preferible lavar con agua y colocar una capa generosa de crema.

Cortauñas: Tanto en manos como en piecitos, las uñas de tu bebé crecerán velozmente de un día para el otro (gracias al consumo exclusivo de leche que hacen) Para minimizar la posibilidad de algún accidente, al momento de cortar sus uñas, enfócate solo en la tarea y en ninguna otra cosa.

Si sientes dudas o crees que a la lista le ha faltado algo, compártela con tu pediatra y que él le dé el visto bueno.

Recuerda reponer de inmediato cualquier producto que esté por terminarse de tu botiquín infantil. No querrás necesitar uno de ellos a medianoche y darte cuenta de que sólo tienes un envase vacío (true story!)

Imagen | Open first aid kit por Pat_Hastings