Aun con todas mis ideas sobre los hijos y recordando como mi padre nos recordaba que «los hijos son prestados», que «los hijos tienen que hacer su vida e irse» y cosas por el estilo, aun con todo eso cuesta trabajo ver crecer a los hijos, se me hacía un poco tonta la frase aquella de «Siempre te voy a ver como mi bebé», tan tonta que ya la empiezo a aplicar y mi hijo apenas esta por cumplir los cuatro años.
Y no es que me niegue a verlo crecer o no aplauda cada uno de sus logros, pero en realidad siento que la vida cada vez va más rápido, llegue incluso a leer que los días ya no duran 24 horas y estaba a punto de creerme esa teoría porque siento que en verdad con los años todo se va más de prisa, mi mamá dice que cuando eres feliz con tu vida, cuando tienes más satisfacción y todo eso, es cuando la vida se va más rápido, tampoco me creo del todo esa teoría, porque de niño los días se hacen muy largos, daba tiempo para hacer tantas cosas, sin preocupaciones se vivía feliz y sin prisas. No tengo una respuesta al porque el tiempo vuela, pero bien es cierto que pareciera que fue ayer cuando cargaba a mi pequeño en los brazos, lo metía a bañar por las tardes en su tina y ahí lo fui viendo crecer.
Hace unos meses aun le preparaba su agua, ponía sus juguetes y lo metía, pero un día mi hijo decidió crecer, ya había mostrado otros signos de dejar de ser mi bebé, tal vez me negaba a aceptar que se estaba convirtiendo en un niño, pero eso paso. Un buen día me dijo que no deseaba bañarse más en su tina y lleva casi 2 meses con pura regadera, adora la hora del baño pero siempre pensé que era porque jugaba en la tina, pero no, sigue adorando entrar en la regadera y cerrar sus ojos mientras el agua escurre, aunque ahí estoy yo diciendo «Leo cierra la boca», «Leo no te tomes esa agua», mientras él se divierte tratando de engañarme.
Lo veo crecer y me dan ganas de detenerlo, pero lo único que se detiene soy yo y mis locas ideas, una voz me dice que debo dejarlo, así como en todo he dejado que siga su ritmo, su tiempo y respetarlo, así en esta nueva etapa, en la que ha decidido crecer y dejar de ser mi bebé.
Gracias por leer.
Last modified: 10 noviembre, 2013