En pocas palabras, identifica tu problema, obtén un consejo y recuerda que no hay nada mejor para tu bebé (y para ti !) que la lactancia materna.

Apoyo

Rodearte de mujeres que pasan por tu misma situación, siempre es una ayuda. Y es mas grato aún cuando esas mismas mujeres pasaron por tu problema, lo superaron y ahora te dan su apoyo y ánimo. Consulta en la web tu líder de La Liga de la Leche más cercana a tu lugar de residencia y confirma los días de reunión.

Tu pareja puede ayudar y mucho!

Cuando se tiene una pareja que te apoya al 100% con tu decisión de amamantar. Para Anitza, el comienzo de su lactancia materna fue difícil, pero su marido se encargó de buscar la ayuda correcta, contactando a una Líder de La Liga de la Leche. Tan exitosa es su historia que pasado un tiempo, la propia Anitza se convertiría en una Líder de La Liga de la Leche.

Una pareja que despierta a la par de la mamá y le ofrece algo de beber mientras amamanta o luego acuesta al bebé, está colaborando para que la lactancia materna sea un éxito familiar.

No hay horarios ni tiempos medidos

Tu bebé se puede alimentar cada hora, pedir cada 30 minutos, eso depende de cada bebé. La leche materna se digiere rápidamente y -al principio- el bebé tiene un pequeño estomago que no puede contener mucha leche.

A medida que pase el tiempo, el bebé aprende a extraer más leche del pecho y se llena más. Por lo tanto, va a demorar más antes de pedir la siguiente toma.

Congestión mamaria

Puede darse entre el segundo y cuarto día de nacimiento de tu bebé. Tus pechos estarán hinchados y duros y será doloroso. Tu bebé querrá prenderse y será muy complicado.
La congestión se debe, en parte, a la bajada de leche madura y al exceso de flujo sanguíneo hacia los senos. Si recibiste suero intravenoso durante el parto, puede hacer que la congestión sea peor. Si la leche no se extrae con la suficiente frecuencia, la inflamación puede llegar para quedarse y causar más hinchazón.
La alimentación a demanda (frecuente) ayuda a mantener el flujo de leche y así, reducir la inflamación». Las compresas calientes en los pechos antes de amamantar puede ayudar a que la leche fluya, o darte una ducha caliente antes de alimentar a tu bebé también ayuda.

Dolor en los pezones

El dolor en los pezones es «normal», pero deja de serlo más allá de los 10 primeros días. Muchas mamás encuentran alivio con el uso de pezoneras.
Si el dolor continúa, es posible que el cierre incorrecto que hace la boca de tu bebé sobre tu pecho sea el causante. Busca de inmediato ayuda en algún grupo de lactancia o en alguna enfermera especializada en el tema. No es un tema que se pueda dejar «para después». Una intervención temprana te evitará problemas mayores.

Problemas con el cierre o enganche

Esto pasa cuando no puedes lograr que el bebé se enganche a tu pecho o bien, se engancha pero su boca no se cierra de manera adecuada en tu pezón.
Mamá y bebé deben ser evaluados, principalmente el bebé, para descartar algún problema en el frenillo sublingual.

Poca producción de leche

Nada aumenta más la producción de leche de manera natural que permanecer junto a tu bebé, piel con piel, recomienda la reconocida partera Ina May Gaskin. Si permanecer en la cama con tu bebé se complica, ayudarte con un fular (y de paso, practicar el porteo) es una buena idea.
Si una extractor de leche tampoco ayuda, es un buen momento de consultar sobre los productos naturales que ayudan con la producción de leche.

Tu, tu extractor y tu trabajo

Combinación complicada si las hay. El extractor debe comenzar a usarse 15 días antes de regresar a tu trabajo. Si ya estás trabajando y la extracción se te hace lenta, habla con tu jefe y explícale que necesitas algún tiempo extra para la extracción. Como argumento, dile que un bebé amamantado se enferma menos, lo cual implica una empleada sin preocupaciones o ausente.

Como muchas otras cosas en la vida, la lactancia materna puede significar un desafío. Y aunque al principio puede verse como dificultosa, lograrás la habilidad necesaria. Cualquier madre que haya tenido problemas en un principio y aunque ya hayan pasado años, te hablará positivamente de lo que fue la lactancia materna en su vida.