Tener en tu pecho a tu recién nacido es una sensación fabulosa y nuevos estudios indican que pasar tiempo piel a piel con tu bebé mejora la unión entre padres e hijo.

Este primer contacto trae varios beneficios, tanto para bebés como para sus padres.

Beneficios para los bebés

Los bebés que permanecen en estrecho contacto lloran menos y establecen mejores patrones de sueño. También reduce su nivel de estrés y ayuda a mantener su nivel de azúcar en sangre dentro de parámetros normales.

Regulan mejor su temperatura al estar piel con piel, ya sea con su mamá o con su papá.

Beneficios para los padres

Cuando un padre tiene la oportunidad de tener a su recién nacido piel a piel en el pecho se libera oxitocina (también llamada la hormona del amor). Esta hormona está relacionada con la unión y la confianza en el ser humano.

Como resultado de este contacto de piel a piel con su recién nacido, un padre no puede dejar de enamorarse de esa nueva personita. Su cuerpo se inunda con la oxitocina y la conexión crece.

No solo con mamá

En las primeras horas después del nacimiento, la madre probablemente pueda levantarse para ir al baño y poder higienizarse con tranquilidad. Ese es el momento ideal para que el papá se instale en un lugar cómodo y coloque sobre su pecho desnudo al recien nacido, quien solo debe tener su pañal puesto.

Una vez en tu pecho y para darte tranquilidad, puedes cubrirlo con una sabanita o mantita fina. No te preocupes, tu pecho le da el calor que necesita.

Puedes hablar suavemente con tu bebé para que reconozca tu voz. No todos los profesionales coinciden, pero algunos de ellos afirma que tu bebé reconoce la voz de su papá desde la semana 28.

Si por algún motivo o razón la mamá no puede cargar al bebé, como comprobarás, el padre puede suplirla en el primer contacto piel a piel. El momento perdurará en tu mente para siempre.